Llega la época de los catarros, de las gripes... y cuando estés pasando el mal trago, mucha gente te recomendará tomar un antibiótico. ¿Deberías seguir su consejo?
La respuesta es NO. Un claro y rotundo NO. De ninguna manera. Este es, quizás, uno de los mitos más extendidos y que más daño puede hacernos.
Primero de todo, hay que dejar algo claro: los antibióticos SÓLO funcionan contra bacterias, estos pequeños seres de aquí:
En cambio, estos son (de izquierda a derecha) los virus de la gripe y del resfriado común:
Debido a que los antibióticos se encargan de atacar estructuras propias de las bacterias, no van a tener ningún efecto beneficioso cuando de virus se trata.
Vía EL PAÍS |
Además, cada vez que una persona toma antibióticos, aumentan las probabilidades de que las bacterias que se encuentran en su cuerpo se hagan resistentes a ese antibiótico, y como esta resistencia se transmite a través de los genes cuando estas bacterias se multiplican, podrían crearse cepas resistentes.
Esto no es ciencia ficción, ya está pasando y es un gran problema. Es el caso del estafilococo resistente a la meticilina, a la penicilina y a la nafcilina, el enterococo resistente a la vancomincina, la tuberculosis resistente a la isoniazida y a la rifampicida y un largo etc. Pero si se pueden buscar nuevos medicamentos para combatir estas cepas ¿por qué es tan importante evitarlo? En pocas palabras, porque:
- Por lo general, las infecciones provocadas por bacterias resistentes dan lugar a enfermedades más largas en el tiempo y con más riesgo de muerte.
- Suponen más costes en la atención sanitaria y en investigación.
- Dificulta el control de las enfermedades infecciosas (cuantas más cepas distintas existan de una enfermedad, más difícil será su erradicación).
- Usarlos sólo cuando es preciso.
- No usar un determinado antibiótico sólo porque se lo recetaron a otros y les va bien (distintas personas pueden necesitar distintos antibióticos).
Vía EL PAÍS |
- Seguir las instrucciones, y esto supone no interrumpir el tratamiento. Aunque ya no notes síntomas, aún pueden quedar bacterias de la enfermedad en tu cuerpo que, de sobrevivir, podrían reinfectarlo.
Todos estos peligros y consejos se pueden generalizar para enfermedades producidas por hongos, virus y algunos parásitos.
Para una información más detallada sobre el tema, pulsa aquí Resistencia a los antimicrobianos, ¿por qué es motivo de preocupación mundial? o aquí ISGlobal
Ah si, me olvidaba:
Debes tomarte un antibiótico para la gripe
¡Buenas tardes a todos!
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