Los frutos secos tienen fama de ser ricos en grasas y por lo tanto engordar. Pero, ¿Es ésto cierto?
El científico Juan Sabeté lleva al rededor de 20 años investigando sobre los frutos secos y afirma que los frutos secos no engordan si se comen de manera moderada pues al ser ricos en grasa y proteinas tienen un efecto saciante y "al comerlos dejamos de comer otras cosas", afirma.
Y aunque todavía no está científicamente probado, Sabaré también apunta a que es probable de que la composición de los frutos secos aumente el metabolismo basal, por lo que si una persona come habitualmente frutos secos le puede cambiar el metabolismo y ser capaz de consumir más calorías sin hacer nada, al contrario del que no los come."
Sabaté afirna que las nueces son el fruto seco que mejor complementa a la dieta mediterranea, al ser rico en ácidos poliinsaturados y omega 3. Por otro lado, los pistachos, almendras y avellanas son más recomendables para la dieta anglosajona, pues los ácidos moninsaturados ayudan a similar el aceit3e de oliva.
Además, tras varias investigaciones, se comprobado que consumir regularmente disminuye un 50% las posibilidades de sufrir un infarto de miocardio, o de morir a causa de una cardiopatía isquémica.
Por si ésto fuera poco, la gran mayoría de investigadores apuntan que consumir grutos secos diariamente reduce el colesterol del malo en un 10%, al igual que los trigliceridos.
Pero, ¿cuál es la cantidad diaria de frutos secos recomendada?
La respuesta es sobre 30 gramos diarios.
Conclusión:
"Los frutos secos engordan"
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